Plataformas Digitales: El principal canal para las operaciones bancarias
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Es un hecho, cada vez es más necesario acercarnos y conocer en profundidad las necesidades de los consumidores. Por eso junto a Mercoplus Latam realizamos el estudio LATAM BANKUSER 2023: ADN de la experiencia del usuario en la banca digital. En esta nota te contamos las principales conclusiones.
En el vertiginoso mundo digital actual, las aplicaciones son el medio preferido para las operaciones bancarias, transformándose en una opción universal y masiva elegida por todos. La comodidad es el principal motor detrás de esta elección, permitiendo operaciones simples y rápidas que se adaptan a nuestro ritmo de vida agitado.
4 de cada 10 bancarizados digitales utiliza únicamente Banca Móvil (APP) para consultar/trabajar con su banco
La banca en línea también juega un papel importante, especialmente entre los más jóvenes y aquellos con niveles educativos medios y altos.
Los usuarios de plataformas digitales tienden a realizar con frecuencia consultas de saldo, transferencias bancarias y pagos de servicios. A medida que aumenta el nivel educativo, la tenencia de tarjetas de débito y crédito también se incrementa, junto con la disposición para contratar productos bancarios vía digital.
La tarjeta de débito es el producto elegido por el 65% de los encuestados, con una mayor incidencia en los mayores de 45 años y en los niveles educativos más altos
La satisfacción general con las plataformas digitales es elevada, con puntuaciones de servicio superiores a 4 en una escala de 5. Aunque la mayoría no optaría por cambiar de banco ante una plataforma digital mejor, un porcentaje notable (4 de cada 10 usuarios bancarizados digitales) contemplaría esta posibilidad si se les presenta una propuesta que eleve la calidad actual.
El uso de redes sociales para operaciones bancarias está emergiendo, pero la disposición actual y futura para su adopción como canal de operación sigue siendo baja.
En resumen, la interacción con las plataformas digitales ha generado transformaciones significativas en la manera en que llevamos a cabo operaciones bancarias. Los bancos deben mantener su agilidad en este entorno en constante evolución, persiguiendo mejoras de manera constante para atender las cambiantes expectativas de sus clientes.
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